¿Alguna vez te has preguntado si el ajo es beneficioso o perjudicial para los perros? En esta publicación, conocerás sobre los beneficios científicamente probados, así como los riesgos que puede representar para la salud de tu perro. Tradicionalmente y lo largo de la historia, el ajo ha sido una especia culinaria muy apreciada, tanto por su aroma y sabor como por sus propiedades curativas.
Textos sánscritos de hace 5.000 años documentan remedios caseros con ajo. El ajo es un tubérculo de la familia de las liliáceas, que también incluye cebollas, puerros y cebolletas. Al ajo se le atribuyen diversas propiedades curativas: antifúngica, antibacteriana, vasodilatadora, etc. entonces, ¿Qué ocurre si le das ajo a un perro?
Cuáles de estos beneficios son reales y cuáles se aplican a los perros.
Ajo y perros, ¿qué es real y qué es falso? ¿Si le das ajo a un perro, que pasa? El ajo no siempre es bueno o malo para los perros, ya que algunas personas hablan de sus beneficios y otras señalan que puede ser tóxico. De hecho, ambas afirmaciones son parcialmente ciertas. Sin embargo, la toxicidad del ajo a un perro está relacionada con la cantidad de ajo que se les da a los perros.
Esto significa que el ajo en sí no es malo, pero se vuelve peligroso cuando se le da más de lo necesario. ¿Es bueno darle ajo a un perro? El ajo es un ingrediente con un aroma y sabor muy fuerte. Según la Fundación Española de la Nutrición (FEN), este aporta a nosotros y a nuestros perros los siguientes ingredientes: vitamina C, yodo, fósforo, vitamina B6.
Se dice que el ajo para perros tiene los siguientes beneficios: propiedades antifúngicas, antibióticas, antiparasitarias. Además, se dice que el ajo ayuda a reducir la presión arterial y el colesterol, aunque estos beneficios aún no se han probado científicamente. Se puede recomendar la inclusión de ajo crudo en la dieta de su perro por sus efectos antifúngicos, antibióticos y antiparasitarios cuando se usa en la dosis y frecuencia correctas.
Por cierto, los beneficios del ajo siempre se aplican al ajo crudo. Tomado en polvo o seco, reduce sus propiedades nutricionales y medicinales. El problema es que el ajo no es apetecible para los perros. Esto significa que a los perros a menudo no les gusta su sabor. Este simple factor puede dificultar la inclusión de este ingrediente en la dieta de tu perro.
¿Es malo darle ajo a un perro? Aunque muchos cree que el ajo es tóxico o nocivo para los canes. La explicación científica de esta afirmación es la siguiente:
La alicina presente en el ajo tiene efectos bactericidas y antiparasitarios en el organismo del perro. Esto es muy útil a la hora de combatir los parásitos intestinales, pero también es arriesgado porque también destruye el microbioma intestinal del perro, que es fundamental para una correcta digestión.
La alicina en el ajo destruye los glóbulos rojos en los perros y se está estudiando para ver si puede causar anemia. Sin embargo, se necesitan altas dosis de alicina para producir dos efectos adversos en la salud de los perros.
Investigación científica perros y ajo
Casi todos los datos sobre los peligros del ajo para los perros provienen de un estudio realizado en el año 2000 en la Universidad Hokkaido de Japón. A cuatro perros se les inyectó 1,25 ml de extracto de ajo por kilogramo de peso corporal durante siete días consecutivos. Por ejemplo, si tu perro pesa 23 kg, obtendrá unos 25 dientes de ajo crudos grandes. Ninguno de los perros mostró signos de envenenamiento, pero los niveles de glóbulos rojos se vieron afectados: disminuyeron. En cualquier caso, incluso con estas altas dosis de ajo, ninguno de los perros se volvió anémico.
Los investigadores japoneses dijeron: “Creemos que los perros deben evitar los alimentos que contienen ajo. Pero otra investigación en Japón realizado durante el 2004 mostró que el compuesto alicina puede resultar beneficioso para la salud de los mamíferos y no hubo informes de anemia hemolítica a pesar de que se proporcionó ajo en altas concentraciones durante el experimento.
Estos hallazgos llevaron a los científicos a rescindir su recomendación anterior de 2000 de dar ajo a los perros. De hecho, algunos veterinarios recomiendan el ajo para estimular el sistema inmunológico y prevenir enfermedades cardiovasculares. Por lo tanto, darle ajo a un perro solo es tóxico para los perros cuando se ingiere en grandes cantidades. Por el contrario, cuando se toma en la dosis adecuada, resulta beneficioso.
