Quien tiene una mascota sabe bien lo importante que es el cuidado de la higiene para mantenerla limpia y con buen olor. Pero, ¿la frecuencia del baño en el perro cambia en las diferentes estaciones del año?, ¿cuál es la recomendación adecuada para las estaciones más cálidas y más frías?, ¿se puede bañar al perro por la noche, ya sea en verano o en invierno? Muchas dudas dan vueltas en la cabeza de los tutores cuando el tema es el baño del perro y, por ello, hemos decidido desvelar de una vez por todas cuál es la cantidad adecuada de baños según las estaciones y qué cuidados son necesarios en esta época. Sólo hay que echar un vistazo.
Baño del perro: la frecuencia dependerá de varios factores
A diferencia de los humanos, el baño del perro no necesita hacerse todos los días. De hecho, el baño semanal es poco recomendable para los perros, ya que es una práctica que puede acabar con la oleosidad natural de la piel de estos animales. Sin embargo, esta es una elección que dependerá de diferentes factores, como la raza, las características del pelaje, el estilo de vida e incluso la salud del perro (si es alérgico o no es un aspecto que puede influir en esta decisión, por ejemplo).
Además, también hay que tener en cuenta la etapa de vida del perro, ya que los cachorros no deben bañarse en las primeras semanas de vida porque la piel es todavía muy sensible y frágil en esta primera etapa. El baño del cachorro sólo está indicado a partir del tercer mes.
Bañar al cachorro en invierno y en verano: cuáles son las recomendaciones para cada estación
En verano, la tendencia es que los tutores quieran dar más baños a sus mascotas por el calor, pero esta lógica no es del todo correcta. Como los perros no tienen glándulas sudoríparas y, por tanto, no producen sudor, no tienen necesidad de bañarse más en esta época del año: una vez cada 15 días o una vez al mes ya es suficiente. Pueden incluso sentir el calor, es cierto, pero hay otras formas de cuidarlo sin necesidad de dar baño en perro, como invertir en la buena hidratación de su mascota y evitar los paseos en las horas de más calor.
En invierno, aunque los tutores tengan miedo de que el baño les provoque una gripe, la rutina no debe cambiar. De hecho, el baño en perros en invierno está súper indicado para evitar la sequedad de la piel y el pelo de los animales en esta época. Sólo hay que tener más cuidado con la temperatura del agua, que debe ser tibia, y calentar bien al animal después del baño.
7 precauciones a la hora de bañar a su perro
1. Elegir productos específicos para mascotas
La piel del perro es totalmente diferente a la humana: es más fina y sensible, tiene un ph diferente y no tiene glándulas sudoríparas. Por ello, es fundamental buscar champús y productos que tengan una fórmula específica para perros. De lo contrario, una elección errónea puede acabar dañando la salud de la piel del animal.
2. Los perros con problemas de piel necesitan productos aún más específicos
Los problemas de salud siempre exigen una atención extra. Por lo tanto, si su perro tiene problemas de piel, como la dermatitis y similares, el cuidado al elegir el producto adecuado es aún más necesario y debe ser indicado y acompañado por un veterinario especializado en dermatología, preferiblemente.
3. Evitar los baños nocturnos
Aunque muchas personas se preguntan si el perro puede bañarse por la noche, esto no es lo más indicado, ya que incluso con el uso de secadores, el perro puede permanecer con el pelo húmedo durante algunas horas y esto puede dañar su piel a largo plazo. Por lo tanto, el momento ideal del día para el baño es por la mañana o por la tarde, porque son momentos del día en los que se puede garantizar que el cachorro conseguirá mantenerse seco hasta la hora de acostarse.
4. Preferiblemente baños con agua tibia, no caliente
El baño caliente en un perro no es la mejor opción. La mayor temperatura del agua, de hecho, puede acabar resecando la piel del animal. Por lo tanto, ni demasiado caliente, ni demasiado fría: el agua ideal para el baño del perro es con temperatura templada.
5. cada tipo de piel necesita unos cuidados diferentes
Cada tipo de abrigo requiere unos cuidados diferentes. Algunos perros tienen un pelaje más grueso, que puede requerir una mayor cantidad de baños que los que tienen un pelaje más corto y suave.
6. Compruebe cómo está la salud del perro
Aprovecha el momento de bañar al perro para comprobar cómo está la salud de tu perro. Pulgas, garrapatas, alergias, nódulos: son varios los problemas que pueden afectar al organismo del perro y es importante que el tutor esté siempre atento a cualquier signo de anomalía.
7. El baño seco es una buena alternativa
No quieres bañar al perro, pero ¿quieres dejarlo limpio y maloliente? Una buena opción para ello es el producto para el baño seco. Así, es posible higienizar al perro sin mojarlo por completo. Es ideal para limpiar al perro entre los baños tradicionales o en una situación de emergencia.