¿Cuáles son las etapas del celo de una perra y qué cuidados necesita?
El hecho de que una perra en celo requiera unos cuidados especiales no es una novedad para nadie. Además de traer cambios físicos, como el sangrado, el periodo puede influir en el comportamiento de tu perra y hacerla un poco más traviesa y agresiva debido a las hormonas. Pero, ¿sabe cómo se produce este proceso? ¿Cuántas fases puede tener? ¿O cómo identificar cuando la perra está en celo? Para aclarar de una vez por todas estas y otras dudas, se reunió en este artículo una guía completa para que entiendas todo al respecto. Compruébalo.
Perra en celo: los principales síntomas del periodo
Las fases del celo en la perra son completamente diferentes del periodo fértil de una mujer, por ejemplo. Por ello, es muy común que existan dudas sobre cuánto dura el celo de una perra, en qué momento la perra entra en celo y, principalmente, qué ocurre en su cuerpo en esta fase. El primer celo suele producirse entre los seis primeros meses y el año de vida de la perra, pero puede variar según la raza del animal. Las perras de gran tamaño, por ejemplo, pueden tardar hasta dos años en pasar por el proceso por primera vez. En cuanto a los síntomas, los principales son el aumento de volumen de la vulva, el enrojecimiento y el sangrado en la zona y el lamido genital. La atracción excesiva por los perros machos también puede indicar que su mascota está en celo.
Fases del celo: sepa identificar cada una de ellas
En general, el celo de la perra se compone de cuatro fases y dura unas tres semanas, con algunas variaciones durante menos o más tiempo. Para entender mejor el tema, hemos reunido las principales características de cada una de estas fases y la duración del celo según cada etapa:
- Proestro: se denomina así a la fase inicial de estimulación hormonal del ciclo estral. En ella se produce la liberación de las feromonas y, por tanto, los machos ya se sienten atraídos por el olor de la perra, pero ella todavía no los acepta. Durante el periodo, es posible identificar algunos cambios físicos, como el agrandamiento de la vulva y una secreción ligeramente rojiza. La duración suele ser de 5 a 10 días;
- Celo: la segunda fase, también conocida como celo, es la responsable de la ovulación. Por lo tanto, si se pregunta en qué fase del celo la perra se queda embarazada, sepa que éste es el momento de tomar precauciones para evitar un embarazo no deseado. En este momento del ciclo, es usual que el comportamiento del animal cambie considerablemente. La perra puede ser especialmente amorosa, inquieta y con muchas ganas de salir. El celo suele durar entre 3 y 10 días;
- Diestrus: esta fase se encarga de asegurar el mantenimiento de la gestación. Por lo tanto, su duración puede variar entre 56 y 90 días, variando según la fecundación o no. Vale la pena recordar que esta fase ocurre incluso en las perras que no se cruzaron o no tuvieron fecundación. Precisamente por eso, es común que muchas perras desarrollen el embarazo psicológico durante esa etapa. En cuanto a los signos, tu perra puede rechazar las relaciones sexuales y comer en exceso.
- Anestro: se caracteriza por ser el intervalo entre las principales fases del ciclo estral. Para las perras preñadas, la etapa termina con el parto, iniciando el anestro. Ya para las perras que no tuvieron fecundación, el anestro no suele mostrar ningún signo evidente en el intercambio de la fase anterior. La duración media de esta etapa suele ser de 3 a 10 meses.
Las precauciones que debes tomar durante las etapas del celo de la perra
Tras identificar a una perra en celo, es esencial que el guardián comprenda que el periodo irá acompañado de cambios físicos, hormonales y, sobre todo, de comportamiento. Por esta razón, se pueden y se deben tomar algunas precauciones para garantizar el bienestar del animal. Es muy probable que, debido al sangrado en la vulva, la perra necesite pañales o bragas que actúen como absorbentes.
No es raro que algunas perras presenten una postura más agresiva e irritable durante el celo. En este caso, es importante que el tutor no se pelee con el animal. Además, es necesario estar atento a la región de la vulva de la perra. Esto se debe a que la hinchazón combinada con el lamido excesivo puede causar inflamación y comprometer la salud del animal. En caso de duda, es importante consultar a un veterinario lo antes posible. Por último, recuerde: si no quiere que su perra se quede embarazada, la mejor opción es castrarla en el primer año de vida. La esterilización evita los trastornos provocados por el calor y previene enfermedades graves, como la piometra canina y el cáncer de mama.
